El arrendamiento de los montes de la Comunidad de Montes Vecinales en Mano Común de Portela y Trigal (Carballeda de Valdeorras, Ourense) ha supuesto un enfrentamiento entre los vecinos y varias empresas pizarreras. Se han llegado a colocar cadenas en las pistas para impedir el acceso de los trabajadores.
El enfrentamiento también se ha saldado con un cruce de denuncias. Al parecer, tres de las empresas que disponen de cantera, naves y oficinas y que utilizan las pistas de los montes no están pagando alquiler a la junta vecinal. Los vecinos pretenden cobrar y han decidido cortar el paso con cadenas, aunque han denunciado que aparecen rotas por las mañanas.
Las empresas, por su parte, defienden que se trata de caminos públicos, tal como recoge el catastro. Los vecinos lo achacan a un error y han llevado el tema al juzgado. Reclaman 3.000 euros anuales por cada hectárea de terreno ocupada y calculan que las empresas explotan unas cien hectáreas sin pagar.
La situación ha sido hecha pública por parte de la junta vecinal, presidida por José Antonio Valle, quien realizó las declaraciones acompañado por el secretario, Odilo Fernández, el vocal, Eloy Domínguez, y el abogado José Antonio Iglesias. La junta vecinal negó cualquier interés en destruir empleos.
Las empresas suman más de 300 empleos. Tanto Intradima como Emeritasa han sufrido las consecuencias del cierre con cadenas. Además, Irosa, Samaca y Pizarras de Trevinca han visto cómo les han presentado una demanda de desahucio y lanzamiento. Las empresas han afirmado que ya había un acuerdo para pagar el doble de lo que se pagaba, pero al final se les subió un poco más. En Emeritasa se quejan de que su cantera está en montes de Casoio y que la pista cerrada con cadenas es pública. En Intradima, por su parte, sostienen que es discutible que las pistas sean privadas y que las formas no son las correctas.
Fuente : www.focuspiedra.com – Mayo 2017