Paseando por los pueblos de La Dordogne en Francia, me he encontrado con un pueblo de lo más bonito a la frontera con La Corrèze y a orilla del río Vézère.
El pueblo de Terrasson-Lavilledieu tiene una forma peculiar de colocar pizarra natural en sus tejados.
La colocación se hace con clavos lo que es muy distinto de la forma tradicional de colocar pizarra de tejado en Francia donde se suele utilizar los ganchos.
Las medidas son «brouillées» lo que significa que van varias medidas, normalmente de las más grande a bajo hacia las más pequeñas hacia arriba.
Las formas no vienen rectangulares que suele ser lo más común, sino redondeadas pero con la diferencia que el redondeo viene hecho a mano y no por máquina lo que da a cada pieza un carácter único y un tejado muy original.
La verdad es que dentro de lo bonito y distinto, unas rehabilitaciones no vendrían nada mal a casi el 50% de las casas… ¿alguien se anima?
Seguiremos paseando con los ojos puestos en los tejados más singulares del mundo a la caza de tejados de pizarra natural!